Cuando el negro y el blanco se hizo gris

Ya sé que no soy el único, es más, todos los chicos que posteamos nos pusimos a pensar en frente de la pantalla el último día y a largas horas de la noche el tema que elegiríamos. En mi caso, estaba muy colgado y bostezando mientras miraba el monitor, empecé a pensar en todos los temas que ya habían sido tratados. Abrí un posteo en el cual comentaron que era informativo y no argumentativo, por lo que ya sabia que NO tenia que hacer. Seguía en blanco y prestando mucha atención a la letra de “Solo quédate en silencio” que sonaba en mi celular, cuando vi el glorioso banner que hizo Laura para todos nosotros. De derecha a izquierda iba circulando un “UN SOLO QUINTO”, lo primero que pensé fue “o cayo una idea del cielo o decididamente esta mal escribir sobre eso”. Sabiendo que no se me iba a cruzar otra idea más que irme a dormir ahora estoy escribiendo sobre el agradecido tema puesto en el banner de Laura.

En primer lugar (como nos dice que tenemos que poner nuestra fotocopia de literatura) los cuarenta, o más, tenemos que reconocer que no teníamos la mejor relación entre los dos cursos. Quién no nos conoce pensaría que teníamos una o mas razones para no llevarnos bien pero ninguno de los cuarenta puede decir con certeza UNA razón. Ninguno sabía los nombres de los otros, bueno, con suerte conocía los de su propio curso. Pero todo cambio después del tan famoso viaje a Cafayate. No estoy diciendo que el viaje en si fue lo que produjo el cambio, porque gente que no fue también pudo dejar los prejuicios de lado y formar un solo grupo. No todos se incluyeron rápido, pero cada uno a su tiempo fue dejando de lado el que dirán y se fue dando cuenta que aunque ese estaba del otro lado de una gruesa pared, también tenia 16 años y sentía lo mismo que uno.

A lo dicho anteriormente se suma (si para la profesora esta mal la culpa es de Esther Lorenzini) la vista de los 4 cursos restantes. El “son todos unos falsos”, estoy seguro que corrió por la cabeza de todos, incluso de algún profesor muy iluso que no sabe lo que es pasar una semana con una familia de más de 20 personas durante 7 días o que todos tus amigos te fuercen inconcientemente a ver que ese era un pibe igual que vos.

Por último (espero que la famosa Esther no lea mi recursivo posteo) cuando pienso en este tema me acuerdo que Sergio nos decía “Van a ver que ellos son iguales que ustedes” y apuesto que a 4º B les decía lo mismo. Era imposible pensar que ese viaje y todos los días que vinieron después no hubieran sido los mismos sin esa experiencia.

Por todo lo dicho es que (admito, es plagio) al que no haya formado parte de esto, quiero que se de cuenta de que nadie es incompatible con nadie, aunque tenga mil diferencias, incluso pueden ser complementarias. Y que estaría bueno que comenten el post tanto con cosas buenas, malas o cursis jaja. Y sinceramente, se me hizo muy difícil escribir en la computadora sin usar xD o U.U jaja así que gracias al que leyó el post completo =)

Cualquier similitud con la realidad es pura coincidencia.

Matías Vivone 5º